La primera vez que la escuché la hice mi palabra favorita en inglés: lackadaisical. Así sin ganas, pareciendo que no quieren la cosa, un día te das cuenta de que Kiev cuando nieva es uno de los grupos más chulos que existen en Expaña. Esa palabra tan molona se inventó para ellos, que a lo tonto han editado ya un par de discos en el siempre delicado y cuidadoso AA Records. Podría haber hablado antes de ellos, de cómo pasé un invierno entero enganchada al primero y esta primavera nació con el segundo, pero resulta que los discos de Kiev cuando nieva flotan antes de posarse. Los lanzan hacia arriba y van cayendo poco a poco sin hacerse notar, como esas pelusas que entran por la ventana y sólo se ven al trasluz. Estos párrafos, por cierto, fueron anotados en un viaje de ocho horas en autobús, porque son sonidos muy de viajes. Estas imágenes las grabé en una escala de ocho horas y no se me ocurrió mejor grupo para sonorizarlas:
Kiev cuando nieva son tres tíos de Huesca y te hacen una canción de cuatro acordes mal dispuestos, percusiones descascarilladas (mucha escobilla) que tienden al machaque a veces arrítmico y melodías de voz coreadas con aparente desatino. Bebiendo de tradiciones folkies del otro lado del océano y de todo aquel que alguna vez haya cogido una guitarra para cantar alrededor de un fuego, sin demasiada preocupación ni respeto por tradición alguna. Ya lo dejan claro desde la primera canción del primer LP, que empieza, tras un zumbido, "no muy lejos de la antena descubrí la lista de los no admitidos a los puestos destinados a mejorar el sonido". Hacen trinchera al otro lado de las puertas del conservatorio, pero joder, qué bien y qué bonito suenan desde allí.
Para colmo, si escuchamos atentamente las letras las descubrimos plagadas de errores sutiles: frases sin acabar, desplazamientos de acentos, repeticiones, discursos que avanzan contra las leyes de la lógica cotidiana y sintaxis imposibles. Pero van y con estos mimbres arman un paisaje de bosques, serrerías, cabalgatas, céspedes, saltamontes, yedra, café con pastas, aves grandes que se cuelan en el salón y cosas así. Y les queda niquelado: una cree que en los pueblos del Pirineo aragonés se vive tal cual, igual que sabe que en las ciudades andaluzas vivimos como en las canciones del Señor Chinarro.
En pocas palabras: Kiev cuando nieva son como un tío con barba de tres días, unos pantalones chulos con los bajos pisoteados, una camisa preciosa con el cuello arrugado y las allstar con la puntera llena de barro; dan buen rollo, molan y resultan familiares y simpáticos a tope. Yo me fío cien por cien de ellos.
Dejo abajo para descarga no sólo los discos de estudio, sino también
Bootleg (incluye grabación en directo)
Edición artesana (demo, 2004 ó 2005)
Kiev cuando nieva (AA Records, 2007)
Todos los ademanes (AA Records, 2009)
Hola!,conseguí la primera maqueta hace tiempo,¡me entusiasman!, pero os aviso de que no es ésta que hay aquí.
ResponderEliminarLo que hay aquí bajo el nombre de "maqueta",son tres temas del 1er LP, y una grabación pirata en directo del "1 septiembre de 2000" (el tucán), quién sabe porqué, alguien decidió hacer esa recopilación al tuntún, y colarlo como si fuese la maqueta... la verdadera es del 1999-2000, y la "demo", se llama "edición artesana", y es de 2004 o 2005.
Lo demás si está bien.
Saludoss!
Sara.
Hola Sara
ResponderEliminarMuchas gracias por la aclaración, he editado el post para que ninguna otra persona tan incauta como yo se la trague... si nos dices cómo conseguir la primera maqueta sería genial.
Kiev cuando nieva son maravillosos, y me pongo muy contenta cada vez que leo a alguien hablar de ellos. Ojalá llegasen a más gente.
ResponderEliminarPor lo que comentas de las tradiciones y el folklore, a lo mejor te sorprendería escucharles lo bien que cantan jotas, ¡y no es broma!
Para mí son únicos, en cualquier caso.